Cuando conozcáis Menorca desearéis quedaros allí para siempre. En este paraíso balear el tiempo pasa a una velocidad diferente. Disfrutad de su sabor mediterráneo y de los parajes naturales de la isla, hoy volamos a Menorca para desvelaros algunos de sus rincones secretos.
Menorca fue declarada Reserva de la Biosfera por la UNESCO. Y es que gracias a la riqueza de los recursos naturales, sus playas, sus fondos marinos y su actividad cultural, es una isla que se puede seguir considerando casi «virgen».
Comenzando por sus playas, tenemos que decir que hay una notable diferencia entre las playas del norte mucho más amplias y con la arena rojiza; y las del sur, calitas de arena blanca y fina y rodeadas de vegetación.
Un ejemplo de las playas que encontraréis al norte es la Playa de Cavallería, con la arena arcillosa, y donde encontraréis un paisaje único al ascender a sus acantilados donde rompen las olas. Muy cerca se encuentra el Cabo de Cavallería, donde las vistas son espectaculares. Otra playa bonita que merece la pena que conozcáis del norte es Cala Pregonda.
En el sur las calitas que más os gustarán serán las que tendréis que caminar a través de senderos e incluso subir alguna montaña, pero tranquilos, el esfuerzo merecerá la pena porque os encontraréis con calas casi privadas. Hay algunas qe parecen sacadas de una postal de viaje, como la Cala Tebalúger o las «dos hermanas» : Cala Macarella y Cala Macarelleta.
Para los que no os apetezca moveros mucho, la Cala Galdana es una de las que más servicios e instalaciones posee.
De la playa al terreno urbano:
En Mahón os recomendamos dar un paseo por el puerto donde veréis yates y barcos de todo tipo. Además, hay muchas tiendas de artesanía donde podréis adquirir las míticas «menorquinas».
Menorca posee una privilegiada situación y de ahí que muchos pueblos hayan pasado dejando una huella en su cultura. Pero además han tenido que hacer frente a los ataques que tenían ya que era un lugar deseado por muchos, y por ello, tiene varias fortificaciones, como es el caso de la estructura de Ciudadella.
Ciudadella tiene una parte antigua llena de recobecos dispuestos a que los descubráis: La Plaza des Born, los palacetes señoriales y por supuesto, un puerto de lo más pintoresco y con mayor ambiente marinero.
Además de las dos ciudades principales, os recomendamos que hagáis turismo por los pueblos menorquines. Uno con mucho encanto es el de Binibeca Vell, a tan sólo 8 km de Mahón.
Os animamos a darle la vuelta a toda la isla, y esto lo podéis hacer con el «Camí de Cavalls« (el camino de caballos). Un trayecto de 179 kilómetros que rodean la isla y que ahora se ha recuperado para el disfrute de todo el que quiera hacer senderismo o rutas en bicicleta.
Como monumentos históricos importantes de la isla podemos destacar la Naveta des Tudons, un monumento funerario único. Sorprende conocer que la isla balear posee un gran número de yacimientos arqueológicos, de los cuales 25 han presentado su candidatura a Patrimonio de la Humanidad.
Para finalizar, os recomendamos visitar cualquiera de los faros que custodian la costa menorquina y que viváis en primera persona la belleza de atardeceres verdaderamente mágicos.
Además, os recordamos que tenemos vuelos Barcelona-Menorca, Madrid-Menorca o Bilbao-Menorca.