Manhattan bajo la luz de la luna

`Relax´ y `Nueva York´ son dos conceptos que rara vez se unen en una misma frase. Esta ciudad está hecha para los rápidos, para los vivos de espíritu, para los que duermen poco porque no quieren perderse nada. Tanto si vienes de vacaciones como si vives aquí, te recomiendo que aprendas a decir ¨no¨ a […]

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`Relax´ y `Nueva York´ son dos conceptos que rara vez se unen en una misma frase. Esta ciudad está hecha para los rápidos, para los vivos de espíritu, para los que duermen poco porque no quieren perderse nada. Tanto si vienes de vacaciones como si vives aquí, te recomiendo que aprendas a decir ¨no¨ a algunos planes, o acabarás como yo, disfrutando de una media de tres o cuatro cafés al día para estar en todos los saraos.

Si viajas a Nueva York durante el día  hay una gran oferta de museos, exposiciones, espectáculos y arte; su noche no se queda atrás. Es importante conocer la cara nocturna de la ciudad, porque nada tiene que ver con la que vemos durante el día.

Sé que a todos nos gusta huir de lo típico, pero creo que en este caso, merece la pena hacer una excepción. Te recomiendo que te subas al famoso bus de dos pisos, y si además hace buen tiempo y estas en el segundo piso que es descubierto, mucho mejor. Es la mejor forma de visitar los puntos más interesantes de Manhattan en tiempo récord. Son 2 horas y media de trayecto que te permitirán tener una idea general de los encantos de cada barrio cuando llega la noche. Por $44 podrás capturar imágenes increíbles de los barrios, edificios y monumentos más emblemáticos en el crepúsculo neoyorkino: Greenwich Village, Soho, Chinatown, Rockefeller Center y Brooklyn Bridge, entre otros.

rockefeller center, new york, manhattan at night f11photo / Shutterstock.com

Ahora sí. Ahora que ya hemos visto los lugares más simbólicos, ha llegado el momento de visitar lo que un Insider debería visitar. Sin duda la lista empieza con un plan muy especial. Y es el mismísimo Woody Allen deleitando a un público corriente, como tú y como yo, con su exquisita banda. Lo sé, resulta difícil creer que una persona tan exclusiva, resulte tan accesible, pero estas son las ventajas de vivir en Nueva York. Aquí, todo puede pasar. Podrás ver al conocido director de cine en el hotel Rosewood cada lunes, a las 7 de la tarde al frente de su clarinete. Importante: se trata de un evento único y muy exclusivo, por lo que te recomiendo que reserves tus entradas con antelación si no te lo quieres perder. Cuestan $175 por persona, y no son nada fáciles de conseguir.

Para los que buscan algo más informal, Nueva York también tiene grandes sitios donde disfrutar de un buen jazz en directo. Muchos de ellos se concentran en Christopher Street, una zona tomada por estudiantes dada su cercanía con la conocida NYU (New York University). Sin duda, mi local favorito es un pequeño bar, mítico de esta zona llamado Small Jazz Club, un regalo para los oídos y una sorpresa para el resto de los sentidos. Sus cocktails pueden presumir de ser de los mejores de Manhattan y el público que los disfruta es de lo más variopinto. Un lugar escondido en el último peldaño de unas largas escaleras decoradas con una antigua alfombra roja, créeme, sin duda un espacio mágico digno de conocer.

Si tu día ha sido largo, y no tienes muchas ganas de hablar, pero tampoco de estar solo, lo mejor es elegir una buena película y rendirse ante una gran pantalla de cine.

Para momentos así Manhattan tira del estilo antiguo con el Metograph, un cine ambientado en los años 20 con una sala convertida en cockteleria. Disfruta de las películas de aquel entonces mientras degustas un cocktail ultima tendencia.

meatpacking hotels, chelsea market, new york, nueva york, manhattan hotel, top roof meatpacking Felix Lipov / Shutterstock.com

Imagino que con el buen tiempo que hace ahí afuera, ganas no te faltarán de conocer un plan al aire libre. También lo hay, y se encuentra en el conocido barrio Meatpacking, del que ya hemos hablado en anteriores artículos. Te recomiendo que antes de subirte a la terraza de alguno de los espectaculares hoteles que se encuentran en esta zona, hagas un poco de pierna paseando por el High Line. No lo dejes para muy tarde porque cierra sus accesos a las 11:00 de la noche. Si de día estas antiguas vías de tren convertidas en paseo son espectaculares, de noche no se quedan atrás.

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Como siempre digo, aunque resulte difícil de creer, hay un Nueva York para cada uno, sólo tienes que encontrar el tuyo propio, sea cual sea.

A qué esperas para conocer la ciudad de la Gran Manzana?

Escrito por: Mamen Sala, The Insider en Españoles en Nueva York